Posiblemente, la mozzarella es uno de los quesos más típicos y reconocidos de Italia. Nunca falta en aperitivos, ensaladas ni, por supuesto, ¡en las pizzas!

La mozzarella es un queso fresco que es elaborado a partir de la leche de vaca. En Italia es muy común comer ensaladas caprese, que se trata de rodajas de queso y tomate acompañadas de albahaca. También es muy típico consumir berenjenas a la parmesana como acompañamiento.

Beneficios

Además de tener un sabor suave y lechoso, la mozzarella es un queso fresco que destaca por su alto contenido en proteínas. Esto nos puede ayudar a acelerar el metabolismo, recuperar masa muscular y favorecer el correcto funcionamiento de las células del cuerpo junto con el buen funcionamiento del organismo en general. Además, las proteínas nos aportan energía y consiguen que el resto de nutrientes que ingerimos se asimilen de manera óptima.

Entre las vitaminas que contiene la mozzarella, destaca la vitamina A. Esta vitamina nos ayuda a proteger la vista y prevenir algunas de las enfermedades relacionadas con ésta, además de cuidar la salud de nuestras uñas y pelo, proteger la piel y reducir el estrés oxidativo.

Otro de los beneficios de este tipo de queso es que da muchas opciones dentro de la cocina para elaborar recetas. De esta manera, podemos comerlo de diferentes opciones: loncheado, en una bola grande, en bolitas pequeñas… ¡A tu gusto!

A pesar de que se trate de un queso fresco, no quiere decir que no engorde. Tenemos que tener en cuenta que se debe consumir con moderación puesto que es un alimento graso. De esta manera, su consumo debe formar parte de una dieta equilibrada.

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