Con más de 800 variedades de uva, 20 regiones de cultivo y centenares de años de historia vinícola, Italia cuenta con una gran cultura de vino. Toscana y Piamonte representan los mejores destinos de Italia en términos de producción y reconocimiento vinícola.
Maridaje de los vinos italianos
Los vinos italianos están hechos para la comida italiana. Los dos van de la mano mejorándose mutuamente. Te contamos como combinar los vinos italianos con su gastronomía para que puedas disfrutarlos al máximo.
Aperitivos o cocteles
Una excelente forma para empezar bien la noche, es con unas deliciosas y refrescantes burbujas, ¿nuestra recomendación? ¡Mejor elige un Prosecco! Disfruta de un espumoso italiano frutado y aromático, seco o extraseco.
Pescados, mariscos y salsas cremosas
Seguro que alguna vez ya te han recomendado los vinos blancos y rosados para los platos de pescado y mariscos. Pero, si son recetas son salsas cremosas, una buena elección también puede ser un Chardonnay, que aunque esta uva es originaria de Francia cuenta con un largo recorrido en los cultivos italianos de vid. Para platos más frescos elige un vino con un sabor más afrutado o cítrico.
Pastas, pollo o ternera en salsa de tomate
Aunque se trate de platos ligeros, cuando el plato se sirve con salsa de tomate suele contar con cierto grado de acidez que puede hacer desaparecer un vino de cuerpo ligero. Mejor elige vinos tintos de cuerpo medio y el punto justo de acidez como, por ejemplo, un Chianti.
Carne roja, carne de caza o quesos curados
Las carnes rojas y quesos curados forman platos con sabores fuertes e intensos. Guisos, estofados, asados, cualquier plato con boloñesa, etc. Para estos platos lo mejor es elegir un vino con cuerpo para hacer frente a los potentes sabores del plato. Te recomendamos un Barbaresco.
Postres
Si no sueles acompañar los postres con vino, te recomendamos que lo pruebes, lo más probable es que repitas. Vinos espumosos ligeramente dulces suelen complementar a la perfección con el postre. Un Brachetto d´Acqui, espumoso tinto afrutado, dulce y aromático, es una excelente opción para la hora de los postres.